martes, 18 de septiembre de 2007

El chico triste que te hacía reír


Ella no paraba de ilusionarse con las personas. Era una chica que dibujaba personalidades en su mente, salían de su cabeza como esos bocadillos que les ponen a los personajes de los cómics cuando piensan.
A veces, aunque ni siquiera creía en esas cosas, veía auras alrededor de ciertas personas, las cuales aparecían o no dependiendo de la forma con la que miraran. Entonces empezaba a indagar en ella. A veces conseguía conocer a esa persona (lo cual solía acabar en una horrible decepción). Otras no, si el otro no se atrevía a acercarse.
Un día, en clase (exactamente igual que todos aquellos rutinarios días), percibió una de aquellas auras entre los compañeros que veía todos los días.
Era un chico con un pañuelo en la cabeza. Un tipo respetado por todos.
Como siempre, observó sus movimientos, sus miradas, aquellas imperfecciones que le empezaron a parecer interesantísimas, que le hacían sonreír para sí misma.
A veces se sorprendía mirándole fijamente, con un descaro que nunca había tenido, e intentaba sacárselo de la cabeza y buscar otras actividades para entretenerse.
Mal momento fue, que empezó el chico a mostrar algún interés en ella, a hablarle, a reír a veces. Ella se sentía torpe, exagerada, estúpida delante suya. Pero no podía evitarlo.
Pasaron los días y se fue olvidando de ella, apenas hablaban. Y por supuesto, aquella tímida no iba a comenzar alguna conversación.
Así fue pasando el tiempo, soñando y soñando, dibujando su personalidad en hojas de papel, aquella mirada melancólica de ojos azules, imaginando mil y una situaciones con él. Pero nunca se veía a la altura.





Llegó el verano, dejó de verle. Lo volvió a encontrar, en otra clase, con sus mismos ojos, sin saber si eran imaginaciones suyas o era cierto que la estaba mirando.
Mejor no saberlo.

P.D.: Vale, lo he escrito sobre la marcha, si hay alguna burrada por ahí ya sabéis porqué es.
Hoy estoy en plan estúpido.

2 comentarios:

Khaos dijo...

lo siento, aún no he leído ninguna entrada, pero prometo hacerlo cuando tenga tiempo :)
gracias por pasarte por mi blog y comentar, yo también me iré pasando por aquí ;)

saludoss

amalia dijo...

Me gustó el texto, lo leí ayer pero no me apetecía comentarte con tus malos humos xD ya estaba yo bastante en plan estúpido :P así que nada! comento hoy... tu tienes muñecas en tu cuarto que bailan cuando duermes?? :O yo no tengo muñecas... xD

un besillo telepatico!!
caramelos de coca-cola o de fanta de naranja que está más rica :D

... que se hunda el firmamento